España no sigue el modelo de Portugal, que acaba de anunciar la gratuidad de sus autovías
Al contrario de lo sucedido al otro lado de la Raia, en Ourense el Ministerio de Transportes resolvió a principios de año subir el peaje de la AP53 (Lalín-Santiago), que usan los ourensanos para comunicarse con la capital de la comunidad.
Los precios se encarecieron un 5,07% (30 céntimos por viaje), pasando para vehículos ligeros de 6,40 a 6,70 euros. Es el tramo de autopista estatal más caro de España. Mientras, sigue pendiente la aplicación del descuento en la AP53 que acordaron PSOE y BNG en la investidura. El pasado mes de febrero, el Senado aprobó pedir la gratuidad total a través del mismo modelo luso, el “peaje en la sombra”, con la abstención del PSOE.