El servicio de autobuses urbanos de Ourense vuelve a generar caos en la ciudad. La mañana de viernes ha dejado a su paso numerosas incidencias en varias líneas urbanas, con incidencias que hasta estuvieron cerca de provocar heridos.
Los retrasos se sucedieron durante las horas centrales del día. Además, en la línea 13A, una persona estuvo cerca de resultar herida al soltarse una de las barandilas para agarrarse dentro del vehículo.
La indignación de los ocupantes fue en aumento a medida que avanzaba la jornada. "E hoxe, co sol que fai, estamos aquí esperando mortos de calor", declaraba una persona que esperaba al autobús en la Rúa Ramón Puga.
Esto no hace más que aumentar el descontento de los usuarios que, una vez más, han tenido que pagar los imprevistos de los nuevos "busitos" de la ciudad. Con varios de ellos fuera de servicio, abarrotados y con muchos retrasos, hay quién se vuelve a acordar de su compra: "Por unhos euros máis poderíamos ter autobuses de verdade".
