La provincia volvió a convertirse en el horno del norte de España y marcó de nuevo las máximas de la mitad norte del país. Con casi 38 grados en O Ribeiro y 36 en la ciudad, ayer jueves 4 de julio fue el día más caluroso de todo lo que va de año. Según las estaciones de Meteogalicia, en Leiro llegaron a 37,6 grados y en Arnoia se quedaron con 37 grados. En la ciudad, la marca se detuvo en 35,9 grados centígrados.
En los tres casos fue la temperatura máxima de lo que ha transcurrido de 2024. Estos registros podrían batirse hoy, donde se esperan temperaturas máximas por encima de 35 grados en muchas partes de la provincia, con picos que en O Ribeiro o la comarca de Monterrei podrían incluso llegar a los 38.
Hoy viernes será la última jornada de esta semana marcada por el sol y el calor típicamente veraniegos, aunque por la tarde podría haber algún chubasco tormentoso en puntos de la montaña oriental. A partir de mañana sábado se espera una importante bajada de temperaturas, acompañada de una creciente nubosidad. Las máximas no pasarán de 27 grados y bajarán las mínimas. Galicia quedará en la influencia de las bajas presiones.
Durante la mañana del sábado estará el cielo muy nublado y podrán registrarse lluvias débiles. Por la tarde, se irán abriendo claros. Ya el domingo las temperaturas, aunque agradables, seguirán por debajo de los 30 grados y los cielos intercambiarán nubes y claros.
