Cruz Roja presentó ayer su memoria de actividades de 2023. A lo largo del año, la institución atendió a más de 18.000 usuarios en la provincia de Ourense. “Detrás de cada cifra, de cada número que resume o noso labor, hai moita intervención de orientación, acompañamento, formación e historias de vidas”, apuntó el presidente provincial Felipe Ferreiro.
El 68% de los usuarios (12.277) que acudieron a Cruz Roja en busca de ayuda estaban en riesgo de exclusión social y necesitaban asistencia para cubrir sus necesidades básicas. En esa cifra se incluyen tanto personas en situación de extrema vulnerabilidad, como desempleados o personas con precariedad laboral, así como niños y jóvenes.
Ferreiro resalta que el empleo es un factor determinante para la inclusión social y celebra que “os datos do Plan de Emprego son alentadores, xa que a través dos nosos proxectos preto de 400 persoas accederon a un posto de traballo”. En total hubo más de 1.400 participantes en cursos de formación y sesiones de orientación que realizaron para acercarlos al mercado laboral, promoviendo la igualdad de oportunidades y la eliminación de estereotipos gracias a la colaboración y complicidad del tejido empresarial ourensano.
Analizando los datos en el resto de áreas, las cifras ascienden a más de 3.680 personas en el área de salud, en la que apoyan a las personas con problemas para que mejoren la gestión de la enfermedad y acompañan a las familias; más de 6.500 en educación, donde promueven la igualdad de oportunidades educativas en cualquier contexto y situación de vulnerabilidad; más de 400 en Medio Ambiente, donde se esfuerzan para mejorar el entorno y la calidad de vida de las personas; y cerca de 1.300 en el área de Socorros, en la que realizaron 76 servicios preventivos en actos sociales o de carácter deportivo.
En cuanto a los colectivos de atención que solicitaron ayuda a Cruz Roja hubo más de 5.600 personas en situación de extrema vulnerabilidad. Destaca también la atención a 2.600 niños y niñas en alguna de la áreas, especialmente en riesgo de exclusión. También fueron 2.800 los jóvenes que ayudaron encaminando hacia el empleo.
Inmigrantes
Por otra parte, 2.918 personas mayores y personas que tienen a su cargo gente mayor acudieron a Cruz Roja. En la provincia de Ourense, estas últimas suelen ser mujeres con una media de edad alta. Hubo también más de 1.000 inmigrantes que necesitaron atención y más de 200 refugiados.
A lo largo del año, hubo más de 8.600 participantes en actividades de sensibilización, entre las que destacan aquellas relacionadas con la promoción de la salud, medio ambiente y las realizadas desde Cruz Roja Juventud.
Las cifras llevan años manteniéndose alrededor de los mismos números, sin embargo, continúan llamando la atención, especialmente las que tienen que ver con la infancia y también las de personas en situación de extrema vulnerabilidad.
Desde la organización agradecen la implicación y el apoyo prestado por más de 10.000 profesionales, colaboradores y empresas sociales, y a los más de 2.700 voluntarios y voluntarias que ayudan puntualmente a la organización y que permiten cumplir con la atención social que necesitan los ciudadanos.
