O RIBEIRO

Melón desmonta el pabellón obligado por una sentencia

photo_camera Un operario sobre el brazo de una grúa realiza los primeros trabajos para desmontar la estructura del pabellón, a medio construir.

La alcaldesa quiere sustituirlo por un centro cultural pero la oposición rechaza la obra "faraónica"

Personal de la Diputación provincial inició ayer los trabajos para desmontar el pabellón polideportivo de Melón, sujeto a una sentencia de derribo del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia por ser construido en el entorno protegido del Monasterio de Melón, declarado Bien de Interés Cultura (BIC). La alcaldesa, Cristina Francisco, calcula que en menos de una semana concluirá la recuperación de la estructura de esta edificación, que pretende aprovechar en un futuro para construir un centro socio cultural y deportivo en el mismo lugar en donde estaba el pabellón y que, según la regidora, es un proyecto aprobado por Patrimonio.

A la vista de la sentencia que obligaba a derribar la obra realizada en torno al año 2002, tras la denuncia de un particular, el Concello ponía en marcha los trámites para la aprobación de un plan especial urbanístico, que facilitara su legalización. Finalmente, la sentencia debe cumplirse, si bien, la regidora asegura que ha conseguido con ese plan especial que se pueda construir en el mismo lugar un nuevo centro sociocultural y deportivo.

Cristina Francisco reconoce que todavía no dispone de financiación para la ejecución de ese proyecto, que contrariamente al pabellón que se desmantela en estos momentos, proyecta que sea un edificio cerrado para la celebración de eventos deportivos, fiestas y actividades culturales. "En adiante preocupareime de conseguir a financiación porque agora o importante é que se pode construir", matizó la regidora.

Sin embargo, el grupo municipal socialista, que cuenta con cuatro ediles frente a los cinco del PP, asegura que ese centro sociocultural y deportivo al que se refiere la alcaldesa no es un proyecto definitivo puesto que antes de disponer de la autorización deberá aprobarse un nuevo plan de protección BIC que afecta a ese entorno, y que todavía está en fase de presentación de alegaciones. El portavoz, Emilio Díaz, calificó la obra de "faraónica", señalando que el centro que pretende la regidora costará 600.000 euros, "cando o concello non ten ni para pagar as dietas dos concelleiros", asegurando que también implica "a expropiación dunha casa".

Los socialistas lamentan que se hayan perdido los 220.000 euros de subvención que se invirtieron en el pabellón y los 53.000 euros que cuesta ahora el derribo, "ademais dos 120.000 que supuxo de sanción por non derribar e que non sei si o Concello pagou", indicaron.

La Diputación se encarga de desmontar y trasladar la estructura, mientras Cristina Francisco calcula que para septiembre estará aprobado definitivamente el plan de protección de este entorno.

Te puede interesar